3 de noviembre de 2008

Seconds...

Vivir una vida plena, llena de felicidad y amor, con unos hijos ya criados y esperar a que la mujer de negro acabe con todo ello...

Amargos sentimientos de una vida que se escapa, de una vida que respira sus últimos suspiros, de una vida que se ha pasado al lado de una única persona como mandan las leyes divinas...

No quiero acabar en un matrimonio en el que después de 20 años casados durmamos en la misma habitación en camas separadas... Donde el amor se haya consumido y no haya ni magia ni sentimientos y todo se haya convertido en pura y aburrida rutina.

No me valen los dichos como que 'el roce hace el cariño' o los sacramentos en plan 'hasta que la muerte nos separe'... no son más que formalidades que se han quedado anticuadas. Y yo me pregunto si la sociedad avanza y cambia, ¿por qué no actualizar también estas parafernalias?

2 comentarios:

Mario Larrá dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Mario Larrá dijo...

Porque si todo cambia no hay puntos fijos. Si no hay puntos fijos te mareas. Si te mareas te hundes. Siempre es mejor que existan maderas a flote, por estúpidos que sean los dibujos que tengan.No porque sean necesarios, si no, por si acaso son necesarios. Está bien nadar a la deriva, y sin referencias, pero da miedo.
Y te lo dice uno que se ha perdido en medio del mar.
(La que he borrado era igual, pero le faltaba una coma y no se entendía)